PEDERNAL PARA MADRID


José Nieto y Victoria López han elaborado un interesante estudio sobre el desarrollo histórico de la minería del pedernal de Vicálvaro. De él se desprende que Vicálvaro formaba parte de un área de especialización extractiva en el sureste de Madrid que, durante la Edad Moderna, tenía a Vallecas como localidad de referencia y a la capital como principal demandante y propietaria de parte del terreno minero. Tratantes y sacadores abastecían a la industria constructiva, el empedrado urbano y otras actividades como la porcelana.
Con la instalación de la Corte en Madrid en 1561, la ciudad reguló esta actividad y obligó a las aldeas del sureste a suministrar piedra y organizar su transporte. Ya desde la segunda mitad del siglo XVI se abrió una brecha entre los agentes del sector: un grupo minoritario de tratantes se benefició de los tráficos del pedernal, el yeso y la cal, mientras que la mayoría de vicalvareños redondeaban sus ingresos con el acarreo a tiempo parcial de estos materiales a Madrid.
A lo largo del siglo XVIII, la explotación del pedernal se llevó a cabo en los propios de Madrid y en otros de particulares, nobles principalmente, situación que se prolongó en la centuria siguiente. Los tratantes de Vallecas ejercieron un control absoluto sobre las contratas con la capital, a la que en 1789, momento quizás culminante de la producción en el área, afluyeron unas 400.000 arrobas (unas 4.600 toneladas) anuales de pedernal. A partir de entonces aparecieron los primeros problemas de agotamiento en algunas explotaciones de Vicálvaro y otros pueblos de la zona.
A fines de la Edad Moderna, la explotación del pedernal provocó conflictos con los labradores locales, lo que no impidió que el negocio continuase su expansión, ni la presencia de vicalvareños en las contratas madrileñas de abasto de piedra. La adaptación del pedernal de Vicálvaro a las nuevas demandas urbanas –empedrados de cuña, afirmados Mac-Adam, porcelana de pedernal- permitió la pervivencia del sector durante el siglo XIX y buena parte de la centuria siguiente.